CAPACITACIONES

Es muy común la idea de que, el emprendedor exitoso, es un tipo "arriesgado". Ello es, más que una realidad, una apreciación originada por el hecho de que la gran mayoría de emprendedores que alcanzan el éxito, pese a que prudentemente evalúan los riesgos en relación a los beneficios que han proyectado, y disipan muchos de ellos gracias a lo antes mencionado, no publican sus evaluaciones. Obviamente, quienes los asumen "arriesgados", carecen de estas últimas, lo que hace que los demás tengan un sentido distorsionado y equivocado de su realidad, viéndolos de ese modo, pese a su carácter previsor. Si bien es cierto, emprender puede requerir de una mayor capacidad para asumir riesgos, un emprendedor que pretenda ser exitoso debe ser capaz de proyectarse, pensando en los posibles escenarios futuros, con el fin de planificarse, organizarse, y preparar su emprendimiento, asegurando cubrir los aspectos mínimos necesarios para su buen desarrollo, en especial aquellos que afectan su seguridad y que, por tanto, condicionan y arriesgan su éxito.